Ha pasado más de una década desde el debut cinematográfico de la espía en piel de Scarlett Johansson y ha evolucionado maravillosamente, tanto Black Widow como la actriz.
Y es que en un principio el personaje no era más que ‘fan service’, una voluptuosa figura femenina para el deleite visual, un detalle de la trama pero no la protagonista.
En parte es la herencia de los cómics, un personaje que hace poses ridículas mostrando un contorno atractivo para el disfrute de individuos incapaces de acercarse a mujeres reales… O incluso ficticias. Pero ése no ha sido todo el problema.
Si bien la misma Scarlett Johansson ha admitido que en ese entonces le parecía un elogio los comentarios sobre su cuerpo, la realidad es que es muy limitado lo que puedes hacer con un personaje cuyo foco principal es su físico.
Eso es algo que el señor Ike Perlmutter nunca entendió, a él le interesaba más vender muñequitos de Marvel a treintones. Claro, esa visión fue lo que salvó a la compañía en sus peores momentos, pero también hay que aceptar lo limitante que es para entregar mejores producciones.
Gracias a Perlmutter tenemos al MCU, pero desde que se fue podemos tener a Black Panther, Black Widow y lo que venga. El señor no quería que se hiciera Captain Marvel pero quería Inhumans… Y fue esa mentalidad la que nos privó de un mejor desarrollo para Black Widow, cuando hasta los mismos compañeros de Scarlett sólo veían a su personaje como una p*ta.
El mejor momento de Black Widow llegó durante Captain America: Winter Soldier pero… su propia película no llegó. Eso fue gracias a Ike Perlmutter, que no entendía la cantidad de gente que veía ahora el MCU.
Los tiempos cambian, las personas cambian, es necesidad que los productos también lo hagan. Johansson ha dicho, ahora que ha madurado, que el personaje también tendría que hacerlo. Ya desde hace años la mitad del público que ven las películas de súper héroes son mujeres, es válido querer brindar mejores modelos femeninos a las niñas.
El pasado está hecho y no se puede cambiar (gracias TVA), sin embargo me gusta en lo que se convirtió el personaje, quisiera que Black Widow se hubiera hecho antes de Infinity War, pero no se puede, sólo me queda conformarme con esta última representación de Scarlett Johansson.
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