El otro día me dio por empezar a leer esta serie que salió por el 2001, aclaro que no soy fan del arácnido y muy por el contrario no me interesa. Sin embargo Garth Ennis le daba la patada inicial y le di la oportunidad a esta serie hecha por diferentes escritores y dibujantes en relación a lo que sucede alrededor de Spiderman y las consecuencias que tienen sus acciones, especialmente las que él desconoce.
Son 22 números y hay de distintos sabores, desde lo más dulce que otorga el amor hasta lo más amargo que trae la traición. Estos escritores toman cada uno situaciones muy diferentes entre sí, ¿cómo le afecta a los villanos cuando Spiderman les impide tomar su pan de cada día? ¿Qué pasa con las personas que están cerca de Parker y las meten en líos? ¿Cómo se relaciona él con otros héroes o vigilantes? ¿Qué pasa cuando Spiderman se mete en el trabajo de la policía? Cada uno de estos escritores busca reflejar la sombra de las acciones del arácnido, una telaraña larga y pegajosa.
Así que decidí intentarlo por Ennis, y aunque sentía que el arte de su historia contrastaba de manera poco agradable con lo que se contaba, la amenaza del villano era lo suficientemente interesante como para querer seguir leyendo. Un tanto fiel a su estilo amargo y salvaje, es una buena manera de empezar, pero conforme fui leyendo pude encontrar una favorita en la serie.
Por más cursi que sea Flowers for Rhino simplemente me cautivó: un hombre con un gran corazón atrapado en un mundo inadecuado para él busca su identidad y la encuentra. Al final es feliz, pero su viaje para llegar ahí está lleno de amarga insatisfacción. Buen trabajo de Milligan y Fegredo.
Greg Rucka también tiene una historia brutal contando las consecuencias que le ocurren a un gangster del Kingpin cuando falla un trabajo importante por culpa Spiderman. Sólo diré una cosa más: fue nominada a un Eisner. Y ya que entramos en ese estilo, tenemos una historia de Tombstone, Heartbreaker, quien entra a prisión tras haberle dado un infarto durante un robo. Pero él no es alguien que se quedará en el bote por mucho tiempo y rápidamente idea un plan para salir de ahí como el horrible monstruo calculador que es.
Hay otras historias cómicas y mucho más ligeras como la de Rhino y el Oso por Morrison, o el par de historias estilo Archie con Darwyn Cooke, o la que cuenta Wells sobre la mente del hombre que odia tanto al arácnido, J. Jonah Jameson. Y no quiero dejar de mencionar particularmente The System por Walsh y Dose, un ejercicio mental interesante sobre las consecuencias que tienen las acciones de los vigilantes en los procedimientos de justicia.
La serie no sigue ninguna coherencia cronológica que sea importante así que pueden leerla como les dé la gana, algunos tienen arcos de dos o tres números y la mayoría son autoconclusivos en un solo ejemplar. Hay varias historias llenas de esperanza pero como no son mi estilo, prefiero dejar que las descubran ustedes. Les invito a leer esta serie, seguro encontrarán algo que les gustará.